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| Autor foto: Moodboard - Getty images |
Durante el embarazo se produce un aumento de la producción de la enzima DAO en la placenta para crear una barrera metabólica y prevenir la entrada excesiva de histamina hacia el feto. Estudios demuestran que la actividad de la enzima se encuentra entre 500 y 1000 veces superior en la etapa del embarazo. Este hecho se da en cualquier mujer, tenga o no déficit de la enzima DAO.
La diferencia es que las mujeres que sufren migraña u otros síntomas típicos de acumulación de histamina notan un cambio muy importante. Experimentan una etapa de gloria durante el embarazo. No tienen que recurrir a ningún fármaco, no tienen crisis de migraña, se encuentran bien. Este aumento de la enzima DAO empieza entre el segundo y el tercer mes de gestación y muchas mujeres describen que hasta la lactancia no vuelven a tener síntomas.
Además de la gran ventaja que tienen en no tener ataques de migraña es el hecho de no preocuparse tanto por la dieta, no hace falta que sea muy baja en histamina. Mi recomendación es tener cura de los alimentos más ricos como las conservas, los quesos muy curados y evidentemente evitar las bebidas alcohólicas, pero pueden hacer vida normal. Durante el embarazo no hace falta tomar suplementación de enzima DAO si los síntomas desaparecen.
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Se ha visto que cuando la actividad de la enzima de DAO continua siendo baja, y por lo tanto se crea una acumulación de histamina, hay complicaciones gestacionales. Puede comportar una ruptura prematura de las membranas, la creación de tumores uterinos y otros trastornos como diabetes, abortos y nacimientos prematuros. Aunque no es lo habitual.
De todas formas sería importante controlar los niveles de la enzima durante el embarazo, así como los niveles de histamina en plasma y orina. Estos tres marcadores podrían incorporarse en los protocolos de los próximos años.
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